Louis estaba esperando a una chica que había conocido la noche anterior. Como ella no llegaba, él corre hasta el hotel que ella había mencionado. La ve en la puerta, a punto de subirse a un auto. Le grita, sacude los brazos. Ella lo mira. Su papá la fuerza a entrar en el auto. Ella lo hace, sin dejar de mirarlo.
Louis se queda con la tristeza grabada en la cara.
-Ya sabes lo que dicen de las princesas - le dice un amigo que lo había alcanzado -. Ellas siempre buscarán a su príncipe. Y tú . . no eres ningún príncipe.
-¿¡ Y cómo lo vas a saber!? - grita Louis - . . ahora ¿Qué voy a hacer?
Adorable al extremo .
1 comentario:
Un nuevo término a redefinir :/
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